Por José Andrés Ardón
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Las decisiones que se están tomando hoy son producto de décadas de acciones que han moldeado nuestro presente y formarán el futuro de nuestro paÃs.
En el estudio de por qué algunos paÃses son más desarrollados que otros una de las teorÃas que más ha tomado relevancia en las últimas décadas es el institucionalismo histórico. Autores como Daron Acemoglu y James Robinson o también Douglas North son de los más leÃdos sobre esta corriente y libros como ¿Por qué fracasan las naciones? o Violence and Social Orders están o deberÃan estar en la mesa de noche de cualquiera que estudie Ciencia PolÃtica o más especÃficamente PolÃtica Comparada. Para los que ya lo leyeron probablemente la situación que esta pasando el mundo les haya provocado recuerdos sobre las ideas y conceptos recogidos en dicho libro y para los que aún no lo han leÃdo espero que este análisis despierte su curiosidad. Sea cual sea el caso, todos estamos preocupados por la situación actual y tenemos expectativas acerca del mundo futuro que nos espera. Es por ello que esta visión institucionalista de Acemoglu y Robinson nos da una idea del desarrollo institucional que existirá o no posterior a la crisis Covid-19.
Uno de los conceptos centrales en su análisis es el de coyunturas crÃticas. Estos son momentos en los que un gran evento o la convergencia de varios factores quebranta el balance de fuerzas económicas y polÃticas de una nación. La forma en la que los paÃses afrontan dichos eventos depende de pequeñas o grandes diferencias en su desarrollo institucional previo, y moldean la forma en la que el desarrollo institucional seguirá posteriormente. Esto quiere decir que el desarrollo institucional es de “trayectoria dependiente†o, dicho en otras palabras, las acciones que se tomaron hace cientos de años influyen en las que se tomaron hace décadas que a la vez influyen en las que se toman hoy. Esto crea un cÃrculo virtuoso o vicioso que lleva a algunos paÃses en una trayectoria hacia el desarrollo económico y polÃtico y a otros hacia el estancamiento. (Acemoglu & Robinson, 2012)
Uno podrÃa argumentar que el Covid-19 es una de esas coyunturas crÃticas que esta afectando a todos los paÃses del mundo. Desde el inicio de la pandemia hemos visto como algunos paÃses han sido más propensos a tomar cierto tipo de medidas más temprano que otros. También hemos visto como la cultura de dichos paÃses ha permitido que salgan más pronto que otros de la crisis. Asà mismo hemos podido ver como el sistema polÃtico y económico de algunos paÃses ha sido más resiliente ante esta crisis mientras que otros podrÃan poner a millones de personas en pobreza durante mucho tiempo. Incluso se ha visto como muchos paÃses tenÃan la capacidad de atender la crisis de salud de una forma mucho más rápida y certera que otros. La forma en la que estos paÃses han logrado lidiar con la crisis no es pura casualidad, es el resultado de muchas acciones buenas que se han tomado en años atrás sin saber que algún dÃa dichos paÃses tendrÃan que enfrentar una pandemia, pero sus instituciones estaban más preparadas para hacerlo.
La incapacidad de ejecución, la mala legislación y la desobediencia a las medidas de higiene y distanciamiento social tampoco son una casualidad en Guatemala. Las tres son producto de las decisiones polÃticas, económicas y sociales que se han tomado hace años sino es que décadas. Modificar patrones de conducta tan arraigados en la población y en el sistema polÃtico no será fácil pero tampoco es una tarea imposible. La llamada trayectoria dependiente tampoco es determinista en el sentido en que los paÃses subdesarrollados estarán asà para siempre. Se requiere que muchas acciones positivas sean tomadas durante mucho tiempo para modificar asà los patrones de las instituciones polÃticas y económicas y las coyunturas crÃticas pueden ser esos puntos de inflexión en donde inicien los cÃrculos virtuosos.
Ahora, ¿estamos en camino hacia mejores instituciones económicas y polÃticas? Le dejaré a cada lector que saque sus propias conclusiones. Como ciudadanos lo que podemos es exigir que las autoridades tomen decisiones responsables, asà como también que cada uno de nosotros contribuya con sus acciones, palabras y propuestas hacia ese desarrollo institucional. El Covid-19 ha provocado una coyuntura crÃtica en todos y cada uno de los paÃses del mundo y el futuro de nuestros paÃses recae en la forma en la que los polÃticos y la sociedad respondan ante las nuevas necesidades que enfrentaremos.
Acemoglu, D., & Robinson, J. (2012). ¿Por qué fracasan las naciones? Estados Unidos: Random House Inc. .