En todos los idiomas, “paz” es una palabra suprema y sagrada que expresa el deseo de Dios para los hombres. El deseo de un reino de paz y justicia; la paz y la justicia que estamos acá para reclamar y testimoniar. – Ernesto Sábato
Este año 2024, Centroamérica celebra el 38º aniversario de los Acuerdos de Esquipulas I, un hito histórico que marcó un antes y un después en la búsqueda de la paz en la región. Firmados en 1986, estos acuerdos representaron un esfuerzo conjunto de los presidentes centroamericanos para poner fin a los conflictos armados y establecer un camino hacia la paz y la democracia.
El origen de estos acuerdos se remonta al Grupo Contadora, una iniciativa propuesta en 1983 por México, Colombia, Venezuela y Panamá, inspirada por el llamado de figuras internacionales como Olof Palme y Gabriel García Márquez. Este grupo buscaba mediar en los conflictos que asolaban Centroamérica, especialmente en Nicaragua, El Salvador y Guatemala, y que amenazaban con desestabilizar toda la región.
Un legado de Vinicio Cerezo, promotor y uno de los firmantes de los Acuerdos de Esquipulas I
La guerra era un mal negocio para nosotros, otros nos vendían las armas y nosotros poníamos los muertos. En Esquipulas encontramos caminos centroamericanos para la paz. – Vinicio Cerezo
El 14 de enero de 1986, Vinicio Cerezo tomó posesión como presidente de Guatemala, convirtiéndose en el primer civil democráticamente electo tras más de 30 años de gobiernos autoritarios. En su discurso de toma de posesión, Cerezo propuso a sus homólogos centroamericanos los Acuerdos de Esquipulas, un plan para encontrar caminos centroamericanos hacia la paz. Esta propuesta fue recibida con entusiasmo y finalmente se concretó en agosto de 1986, cuando los presidentes de Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua y Costa Rica firmaron los Acuerdos de Esquipulas II.
Los Acuerdos de Esquipulas I establecieron las bases para la desmovilización de los grupos armados y la democratización de la región. Entre los logros más destacados se incluyen la promoción del cese al fuego y la desmovilización de la resistencia nicaragüense, el inicio de procesos de diálogo nacional con todos los sectores de la sociedad, la emisión de decretos de amnistía para facilitar la reintegración de los combatientes en la sociedad y la creación de condiciones para el desarrollo democrático y el respeto a los derechos humanos.
Los Acuerdos de Esquipulas no solo tuvieron un impacto profundo en la región, sino que también fueron reconocidos a nivel mundial. La ONU declaró 1986 como el Año Internacional de la Paz y figuras como Mijaíl Gorbachov, quien promovió la paz global, recibieron el Premio Nobel de la Paz en 1990. A nivel regional, estos acuerdos llevaron a la creación del Sistema de Integración Centroamericana (SICA) en 1991, impulsando la cooperación y la integración entre los países de la región.
Fundación Esquipulas, más de 15 años trabajando por la paz, la democracia, el desarrollo y la integración
En 2008 se fundó la Fundación Esquipulas, un centro de pensamiento, diálogo y acción desde la sociedad civil inspirado en los valores y objetivos de los Acuerdos de Paz de Esquipulas I y II. La Fundación se dedica a la construcción de una cultura de paz, el fortalecimiento de la democracia y la promoción del desarrollo sostenible en Guatemala y Centroamérica.
A lo largo de los años, la Fundación Esquipulas ha sido un puente de entendimiento y acción en la promoción de los valores de paz y democracia, trabajando incansablemente para fomentar el diálogo y la cooperación en la región. Su labor ha sido crucial para mantener vivo el espíritu de Esquipulas, adaptándolo a los nuevos desafíos que enfrenta Centroamérica en el siglo XXI. La Fundación ha organizado numerosos foros y encuentros que han servido como plataforma para la discusión y la implementación de políticas públicas orientadas al bienestar de los centroamericanos, entre las que destaca el Foro Regional Esquipulas.
Los países centroamericanos se enfrentan a la necesidad urgente de consolidar la paz y la democracia mientras abordan la integración regional. Las revoluciones en curso en diversos ámbitos demuestran que la democracia formal y el estado de derecho son fundamentales para el futuro de la región. Esquipulas es un recordatorio de que las soluciones pacíficas y concertadas son esenciales para superar las divisiones y construir un futuro más equitativo y justo.
Al conmemorar 38 años de los Acuerdos de Esquipulas I, es fundamental reflexionar sobre el camino recorrido y los desafíos que aún persisten. La paz, la democracia y el desarrollo en Centroamérica requieren de un compromiso continuo y renovado. Los Acuerdos de Esquipulas nos recuerdan que, aunque los tiempos cambien, la búsqueda de soluciones pacíficas y concertadas sigue siendo la mejor vía para construir un futuro próspero y justo para todos los centroamericanos.
La conmemoración de este aniversario nos invita a honrar el legado de aquellos líderes visionarios que, en medio de la adversidad, apostaron por la paz y la integración, sentando las bases para una Centroamérica más unida y fuerte.
La construcción de la paz en Centroamérica